Hasta ahora, mi experiencia como voluntaria en Viraventos ha sido una experiencia profundamente enriquecedora tanto a nivel personal como humano. Cada encuentro en el aula es una oportunidad más para aprender mutuamente, no sólo sobre el idioma, sino también sobre cada historia, culturas y personalidad de las personas que forman parte del grupo.
Al principio estaba bastante nerviosa, por la responsabilidad que implica enseñar desde el respeto y la empatía. Sin embargo, con el tiempo fui encontrando seguridad en la relación con el alumnado, con mi compañero de voluntariado y también con el acompañamiento por el equipo de Viraventos.
Lo que más me conmueve es ver los pequeños grandes logros de las personas participantes : presentarse con confianza, poder leer un cartel en la calle o simplemente expresarse con más seguridad. Ver que se rien entre ellos y ellas, que crean vínculos es lo más bonito de todo. Esta experiencia me ha enseñado a mirar más allá de las palabras, a reconocer el valor del encuentro. Agradezco mucho formar parte de este proyecto y espero poder seguir colaborando y aprendiendo.
Gracias por todo,
Aïnoha Silly Vergara
